creo que un día intente hablar de mi banda sonora, algo que desde hace años busco cada mañana....
.......una “soundtrack” que me acompañe a pasar el día...
antes, de soltero (siglo pasado), tenia la costumbre de acostarme y despertarme con la radio, con lo cual, la banda sonora musical solía ser la canción con la que me levantaba.... con todos sus peligros.... algún día me lo he pasado silbando a los “chunguitos” en el despacho...
con el paso del tiempo, me fueron imponiendo otras costumbre..., lo de leer en la cama y escuchar música.... ¡fuera!, a la cama se va a o..... (hasta aquí puedo leer),
y vaya, hasta empece a dormir algo. Pero la vida te demuestra que es muy complicado cambiar, ¡apareció en mp3!, dispositivo pequeño, fácilmente escamoteable, así que aprendí a quedarme dormido con un auricular en el oído, sin que apenas nadie se diera cuenta.
Ventajas; las selecciones musicales son controlables.
Inconvenientes, el terrible dolor de oído mañanero.
En este punto descubrí el Ipod, mi perdición, canciones, videos, podcast, pelis, ¡toda una juerga multimedia para ir a la cama!
Pero la evolución es imparable, los ipod han ido creciendo en memoria, con lo cual el nivel de exigencia alimentaría iba descendiendo a medida que se incrementaba la capacidad y cada día echaba de comer más basura a los “cacharritos”, ya apenas filtraba, lo que me pasaban lo ponía con la intención de borrar y luego ná de ná
Es este punto estoy casi como al principio, es complicado elegir la banda sonora diaria y ademas ¡tengo dolor de oído todas las mañanas!
Conclusión: escuchad la radio.
Saludos
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